Ayer, tras la cita con las urnas, tanto Andaluces como Asturianos, vivimos, todos los españoles, una noche electoral emocionante donde, lo que pareció ser no fue y lo que fue nunca antes pareció ser.
Antes de nada, aclarar que este no es un blog político. Aquí no nos decantamos nunca por ningún color, sólo criticamos la tele desde el punto de vista del espectador. Esta crítica en ocasiones nos llevará a márgenes o a derivas donde podrá dar la sensación de que nos descantamos por una cadena de televisón, por una política, un equipo de fútbol.... pero nada más lejos de la realidad. Aquí sólo criticamos lo que vemos, y la crítica no es más que una balanza donde se condena y donde se aplaude lo que a nosotros llega, en este caso, a través de nuestra querida "caja tonta".
La primera de ellas es "la imagen del balcón"- esta vez un balcón sevillano- del candidato de derechas Javier Arenas.
La imagen que nos ofreció la 1 mostraba una cosa que en lacriticadelatele denominamos falsa fachada. Una falsa fachada es aquella situación donde, digo lo que mejor me venga pero mi cara no acompaña.
Ayer , el eterno candidato Arenas era una falsa fachada, pero no conforme con eso, nos regalo en el mismo pack tres falsas fachadas más. Una ministra, una alcaldesa y un ministro (de números y con gafas de pasta negra).
En fin, el balconcito andaluz parecía más un teatrillo de marionetas - hilos movidos desde madrid- que la celebración de una victoria, que era lo que ellos intentaban ofrecernos. Si tan cerca quieren estar de la gente, si tanto valoran y se enriquecen con los medios de comunicación ( en este caso la tele), hagan una valoración de los resultados real. La gente no es tonta( gracias a Dios), ya todos sabemos de todo, ya nadie es analfabeto, ya no se puede manipular a todo un país con una imagen de sonrisa falsa.
Señores políticos dejen de utilizar la televisión para confundir a la gente. La televisión, en cuanto a información se refiere debe ser verdad, no un intento de manipular a costa de no ser sincero ni con uno mismo, ni con las miles de personas a donde llega esa información. Un fracaso electoral es un fracaso, en Sevillla, en Asturias y en Nueva Zelanda.
No intenten hacernos ver nubes azules en un campo donde aún ( y siempre desde la perspectiva de los datos) hay rosas.
Mi enfado como telespectador fue mayor, cuando después de las comparecencias de todos los candidatos, aparece,ya desde Madrid, la señora Mª Dolores de Cospedal, que no solo contenta con la imagen volcada desde el balcón andaluz- falsas fachadas-, me vuelve a reinterpretar unos datos que nada tenían que ver con la realidad.
La Castellano-manchega, dice que su partido ha ganado las elecciones en Andalucía ( cierto es, por numero de escaños ha ganado con 50) y que la izquierda a perdido. Pero, a la hora de referirse a Asturias, como los datos no le ayudaban, la chica de la mancha, va y dice:
... "el centro derecha ha ganado las elecciones en Asturias"
Vamos a ver chica:
Si el Centro-derecha ha ganado en Asturias ( cosa cierta porque entre ambos suman los 23 necesarios para gobernar), ¿Por que no has hecho lo mismo, cuando hacía unos segundos, con los datos andaluces en mano, sólo decías que Arenas había ganado? ¿ No se te ocurrió decir, en honor a la verdad y ya que ibas a utilizar esa frase en el tema Asturiano, que la izquierda en su datos globales había ganado en Andalucia? ¿ No sabes que aunque no lo digas, la gente lo comprobará cuando vea al Sr Griñán como presidente de la Junta?
Fue un momento tan ridículo, que no me acuerdo de uno tan bochornoso desde aquel, donde se culpabla a una banda terrorista ( desaparecida en la actualidad para alegría de este país) de algo que no había hecho.
No señores no, no queremos manipulación en los medios, no de un lado ni de otro.
La tele es para informar NO PARA MANIPULAR.
¡Basta ya!
lacriticadelatele
Afortunadamente la gente se esta dando cuenta, sin necesitar de mucho tiempo, que lo que parecía, hace escasos 4 meses, como la solución a la situación, se está convirtiendo en todo lo contrario, adoptando medida que generan inestabilidad laboral, reducción de la capacidad adquisitiva y un largo etcétera. Como se suele decir, mas vale lo malo conocido que lo bueno por conocer.
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